El Sabunim Luciano con el GM Han Chang Kim
Un mensaje de voz que me dejó congelado y con el corazón latiendo a mil por hora. Era el Maestro Han Chang Kim quien me dejaba su número de celular. Lo llamé inmediatamente y le dije que nos podíamos encontrar en el lugar que él me diga, a lo hora que le convenga. La cita fue al otro día en un café en Buenos Aires. Traté de llegar temprano para que el Maestro no me tenga que esperar, pero fue en vano. Cuando llegué, él ya estaba allí tomando un café. Me temblaban las manos. Él hombre de 73 años enfrente mío fue quien trajo el Taekwondo a la Argentina a bordo de un carguero holandés en 1967. Un viaje que le llevó 2 meses y 5 días. Que lo llevó por Hong Kong, Malasia, las costas de la India, Sudáfrica, Brasil y Uruguay. Un viaje que le significó cambiar de lleno su vida y pasar a vivirla en un lugar lejos de su tierra, de su familia y de sus costumbres. Este hombre fue encomendado por el General Choi para traer el Taekwondo a la Argentina. A partir de él, comenzó nuestra his